Prácticas antisindicales
Los trabajadores y trabajadoras de Style Industries Ltd, una fabricante de cabello sintético, llevan luchando desde 2015 por el reconocimiento de su sindicato, el Kenyan Union of Hair and Beauty Workers (KUHABWO). KUHABWO reclutó a 3.811 trabajadores de una plantilla de 6.000, de los cuales el 85% son mujeres, pero la empresa hizo todo lo posible para acosar y disuadir a los miembros del sindicato. Cuando los delegados sindicales acudían a reclutar trabajadores durante los descansos o la hora de la comida, el empleador recurría a la policía para acosar y detener a los trabajadores e impedir que hablasen con los representantes sindicales.
El conflicto se estancó en el proceso de conciliación, y el caso llegó al Tribunal de Empleo y Relaciones Laborales, que en 2017 emitió una orden de restricción contra la empresa. El auto ordenaba a Style Industries que dejara de “victimizar, intimidar, coaccionar, acosar y consentir prácticas laborales injustas” y que permitiera que el caso se resolviese en los tribunales. Además, el tribunal señaló que la empresa tenía que dejar de rescindir contratos y despedir a miembros del sindicato por el hecho de pertenecer al mismo.
Pese a la decisión del tribunal, las tácticas antisindicales de la empresa no cesaron, y en mayo de 2021 despidió a otros 150 miembros del sindicato. Los que no se dejaron disuadir por la maniobra y siguieron siendo miembros del sindicato fueron amenazados con el despido.
En junio de 2021 se puso en marcha una campaña de solidaridad para concienciar sobre las tácticas antisindicales de la empresa.